¿Cómo enseñar a los niños a ser equitativos y justos?

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¿Cómo enseñar a los niños a ser equitativos y justos?

Ser justos y equitativos en la escuela y en la vida cotidiana es un concepto difícil para nuestros hijos pequeños, pero si utilizamos recursos para que aprendan a compartir, entenderán que su derecho a disfrutar de algo es exactamente igual al derecho de los demás.

Tanto en casa, en la escuela y en cualquier espacio de convivencia con niños de su misma edad, es recomendable explicar que lo ideal es compartir desde el tiempo y la atención de los adultos, hasta los juguetes y materiales; aprender a tomar turnos y a negociar para repartir equitativamente.

Vivimos en una sociedad de insuficientes recursos y de repartición inequitativa y sin querer, a veces, enseñamos a nuestros hijos que, si no hacemos “trampa” o si no somos agresivos, no se triunfa en la vida.

Para empezar a explicar a los niños sobre la equidad y la justicia, podemos empezar por explicarles que, en los diferentes espacios como la escuela y la casa, existen reglas que debemos cumplir para tener una convivencia sana, y que, si éstas no son respetadas, se tienen consecuencias que repercutirán en su vida social.

  1. Mediante el ejemplo, podemos enseñarles a tratar a las personas de manera apropiada, sin permitir que tus creencias o sentimientos personales interfieran con tus decisiones acerca de la gente: es darles una oportunidad a todos, sin discriminar por ningún motivo.
  2. Enseñarles que cosechas lo que siembras, es decir, que nuestros actos y decisiones tienen consecuencias. Si podemos transmitir esta idea a los hijos desde pequeños, van a tener mucho mejor manejo del conflicto, del enojo y la culpa a lo largo de toda la vida.
  3. Utilizar algunos ejemplos para reflexionar con los niños:
  4. Si te acuestas más tarde, te levantas de mal humor y cansado.
  5. Si comes sólo comida chatarra, no tienes energía para correr o concentrarte.
  6. Si dejas estos juguetes tirados, lo primero que vas a hacer mañana es guardarlos, en lugar de ocuparte en algo más atractivo.
  7. Si gastas tu dinero en forma impulsiva, siempre en cosas pequeñas, nunca podrás ahorrar lo suficiente para comprar lo que realmente quieres.
  8. La sugerencia es que, ya que los niños entendieron las consecuencias negativas, cambies el vocabulario para enfocarlo a lo positivo: “cuando te acuestas a buena hora, siempre te levantas de buen humor”.

Como papás debemos ser conscientes que en la medida que nuestros niños entiendan que cada persona es diferente y tiene necesidades particulares, serán más empáticos y esto les permitirá tener una serie de oportunidades en cualquier circunstancia de su vida.